El equipo femenino del RC Jolaseta iniciaba la segunda fase de la División de Honor B femenina con el objetivo de meterse en la Final Four y aspirar al ascenso, incluso al título de la categoría. Siguen siendo unas metas alcanzables, después de una brillante primera fase de la competición, en la que las nuestras acabaron en la segunda plaza de la clasificación de su grupo, aunque se han alejado después de la derrota por 3-0 en Castelldefels.
Jolaseta arrastraba siete puntos de la primera fase para enfrentarse a un rival de mucha entidad, que ya partía con la ventaja de haber acumulado nueve puntos en la primera parte de la competición. A las dificultades deportivas se han sumado las adversidades extradeportivas, que han minado la capacidad de las jugadoras de Jolaseta para competir con un rival directo para luchar por lo máximo.
La primera traba ha sido logística, porque el equipo vizcaíno ha tenido que madrugar para viajar a las siete de la mañana. Ha sido en la ciudad condal donde se ha encontrado con la desagradable sorpresa de que “nos han robado las mochilas a más de la mitad de las jugadoras”, describe así el entrenador, Nacho Lecanda, lo sucedido en Barcelona.
Este inconveniente sobrevenido ha retrasado la llegada del equipo vizcaíno al campo y ha limitado el tiempo de calentamiento de unas jugadoras que han tenido que utilizar las equipaciones y el material que el Castelldefels les ha dejado. Sobre todo, este cúmulo de obstáculos ha afectado a la concentración de las deportistas para hacer frente a un partido de mucha exigencia. “Sabíamos que teníamos todo en contra para poder competir”, explica Lecanda.
“Aun así lo hemos intentado, pero ninguna de las jugadoras tenía la cabeza en el partido, como es normal”, argumenta el entrenador de Jolaseta para justificar a sus pupilas por el 3-0. “Felicito a las chicas por el esfuerzo que han hecho, después de todo lo que ha pasado”.
Lo sucedido en el campo queda sin valor a la hora de analizar el potencial de los dos equipos, porque las catalanas aprovecharon las circunstancias para imponerse con dos goles de Tania Escaich y uno de Victoria Borgarucci. Jolaseta se queda ahora a nueve puntos de la cabeza de la clasificación y pierde prácticamente todo margen de error, si quiere mantener sus ambiciosos objetivos. Un aciago viaje no debe echar por tierra todo el buen trabajo que ha hecho hasta ahora el equipo de Neguri.
